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lunes, 10 de marzo de 2014

El bar Alameda, un gran clásico bilbaíno


Hoy os vamos a hablar de uno de los bares de siempre de Bilbao: el bar Alameda y como no, de su pintxo estrella, la felipada. El bar Alameda, situado en el número cuarenta de Alameda Urquijo, abrió sus puertas en 1954 y en este más de medio siglo de historia se ha consolidado como uno de los bares clásicos de Bilbao que no puede faltar en la ruta gastronómica ni de los turistas ni de los bilbaínos. Ha recibido premios como el Premio a la Barra más bilbaína en 2010, a la Mejor Tortilla en 2001 y al Mejor Bar Clásico en 1999, y también lo recogen el libro De Bilbao de toda la vida de Tomás Ondarra y la guía gastronómica El sabor de Bilbao de Javier Urroz.

Sus secretos nos los cuenta Paco García, que regenta el bar desde 1995 aunque empezó a trabajar en él como empleado ya en 1975, toda una vida en el Alameda. Nos habla desde "el confesionario del padre Francisco" tal y como lo ha bautizado una de sus clientas, en esa esquina de la barra es donde Paco pasa el día preparando las felipadas a la vista de todo el mundo. Este pintxo es un sandwich en forma de triángulo que lleva lechuga, anchoas, mayonesa casera y un puntito de tabasco. La parte de arriba del pan de molde, Paco la corta a la mitad para que sea más fina.  Este pintxo lleva haciéndose casi desde que se abrió el bar, por aquel entonces un cliente llamado Felipe, le pidió a Teo -dueño del Alameda- que le dejase hacer unos pintxos para sus amigos y tuvo tanto éxito la receta que ha llegado hasta hoy. Además de las felipadas, de las que Paco puede llegar a hacer 300, 500 o 800 al día dependiendo de la demanda, los otros dos pintxos reyes de la casa son la ensaladilla, con un poco de pepinillo que le da el toque diferente, y la anchoa rellena de pisto. Este último "es el más nuevo, se hace desde hace sólo quince años"cuenta entre risas, y fue invento de su mujer, María Alunda, que es el alma máter de la cocina del Alameda. Tiene una oferta de los más variada, se prepara -para comer allí o para llevar- bacalao a la vizcaína, txipirones en su tinta y encebollados, albóndigas, pimientos rellenos, merluza mariscada, callos… y Paco elabora "con mucho cariño" un chorizo casero al estilo Salamanca.

"La clientela la haces una vez, pero luego hay que mantenerla todos los días. No hay secretos, lo más importante es la calidad y que los productos sean frescos, por eso hago los pintxos al momento". El Alameda cuenta con una clientela fiel, "tenemos hasta cuatro generaciones juntas, los clientes traen a sus hijos y cuando crecen estos traen a los novios y así sucesivamente". Entre sus clientes habituales se encuentran consejeros del Gobierno vasco, Diputados Generales, empresarios, banqueros y artistas. El Alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, bautizó al pintxo que hacen de huevo, gamba y mayonesa como "bilbainito", el cineasta Alex de la Iglesia, Juanma López Iturriaga o el bailarín Igor Yebra son clientes de siempre. Se puede decir que el Alameda es la "segunda sede"de la Asociación Bilbao Ballet, fotografías y zapatillas adornan sus paredes. También ha sido escenario de varias secuencias de películas, "al protagonista de una película japonesa le rodaron comiendo aquí mientras preparaba felipadas, y en otra ocasión ocurrió lo mismo con el bailarín Antonio Marquez que actuó en el Euskalduna y después rodó aquí".

El bar Alameda abre todos los días -excepto el domingo- de ocho de la mañana a once de la noche entre semana, y viernes y sábados amplía su horario nocturno una hora más.














lunes, 17 de febrero de 2014

Llega The Pop Up Shop a Bilbao


Ultimamente están entrando fuerte en Bilbao las nuevas tendencias de compra europeas, triunfan mercadillos como The Sunday Market Bilbao -que se celebra de nuevo el próximo domingo 23 de febrero- y las tiendas pop up. ¿Y qué son las tiendas pop up? Son tiendas efímeras que tan sólo permanecen abiertas durante unos días, de forma que la venta de sus productos es exclusiva. Las pasadas Navidades ya pudimos ver alguna como The City en la calle Ercilla, y este fin de semana (viernes 14 y sábado 15 de febrero) se ha celebrado The Pop Up Shop, un mercadillo urbano organizado por la guía digital Very Bilbao, que ha reunido las mejores ofertas fin de rebajas de 25 marcas en el antiguo local que For tenía en Gran Vía 22.

Repartidos en las tres plantas de la tienda hemos podido encontrar una gama de artículos de lo más variada: flores, mobiliario de diseño, cremas y jabones, equipamiento deportivo, ropa chic, joyas, servicio de catering, ricos cócteles, fotografía, libros, bolsos, calzado, antigüedades… Además las compras se hacían mejor al ritmo de la música que pinchaba una DJ allí mismo y no faltaba el buen humos para hacerse unas divertidas instantáneas en el photocall que habían montado. Una apuesta diferente que ha satisfecho al público, que no dejó de entrar en el local en ningún momento.

Pudimos conocer el estudio de arquitectura Global, situado en la Torre Iberdrola, que realiza muebles de diseño a medida, el arte de las fotografías de La Absurda Zurda y de YellowKorner, y las preciosas joyas de Pedrusco y de la diseñadora Inés Susaeta, inspiradas en el mar.



La moda vino de la mano de marcas como Scotch&Soda, N32, Mimmëko, LeRoom, JAS Bilbao, Ricas y famosas -acompañados por su inseparable perrita- y Moca Couture; los artículos de diseño y complementos de Narata Shop, para una piel perfecta los productos de Kiehl´s y De la Cruz Beautique, los libros de Top Books, las antigüedades y muebles vintage de Isabel Madinabeitia y las flores de Ruiz de Ocenda y Fiore. Bodega Urbana y la Antigua Cigarrería ofrecieron sus mejores caldos y cócteles, y el Catering del Grupo Iruña presentó su variada carta de servicios. Cambiando totalmente de registro y completando la oferta, también estuvieron las bicis y el material deportivo de Maestre Bikes y el gimnasio Up Fitness Club.












viernes, 14 de febrero de 2014

¿Conoces los fosteritos?


Los fosteritos son nada más y nada menos que las entradas al Metro de Bilbao, el nombre les viene del arquitecto encargado del proyecto de toda la obra, el británico Norman Foster. Hace ya 18 años desde que se inauguró este suburbano en 1995. Desde el comienzo la idea en torno a la que giró el diseño del proyecto del Metro fue la mezcla entre la originalidad, la sencillez y la eficacia, creando un medio de transporte funcional y agradable para los viajeros. Y así ha sido.

Bilbao se puede recorrer a pie perfectamente, pero para la vida diaria y el ritmo que exige una ciudad el Metro ha sido una solución excelente. Acorde con el tamaño de la Villa, dispone tan sólo de dos líneas que conectan Basauri con Plentzia (Línea 1) y Basauri con Santurtzi (Línea 2) , comparado con los metros de otras ciudades como Madrid o Londres, además de nuevo es muy pequeño, nada que ver con el laberinto que puede suponer el metro de Londres -en funcionamiento desde 1863- ni con los techos bajos de los andenes del de Madrid. Las estaciones del Metro de Bilbao se encuentran cercanas al exterior, no hay que descender pisos y pisos hasta llegar a ellas, la longitud media de los andenes es de alrededor de 160 metros y sus techos tienen la altura de dos pisos, por lo que la sensación es de mucha amplitud, los suelos y paredes son de colores claros y el mobiliario en metal de líneas sencillas.

Los fosteritos conectan las estaciones con el exterior, construidos en cristal y acero dejan pasar mucha luz durante el día para por la noche llevarse el protagonismo al estar iluminados. Pegados a los fosteritos se encuentran los mástiles con el logo de Metro que señalan las estaciones.





Esta semana un documental de la cadena estadounidense CNN ha situado en octavo puesto a las estaciones del Metro de Bilbao entre las doce más impresionantes de Europa. Nos es la primera vez que medios extranjeros se fijan en él y su diseño ha cosechado numerosos premios, entre ellos el Premio Brunel de Arquitectura -tanto para el proyecto general como para la estación de Sarriko en particular-, el premio "Veronica Rudge Green Price" que la Universidad de Hardvard otorgó a Norman Foster por él y el Premio Nacional de Diseño Industrial entregado por el Ministerio de Ciencia y Tecnología a Akaba, la empresa que diseñó los bancos.

jueves, 6 de febrero de 2014

De tigres y leones



Aunque en Bilbao somos de leones también tenemos por ahí algún tigre suelto. El edificio de "El Tigre" de Deusto es del que hoy vamos a hablar. Este singular edificio, con forma de ele y construido en 1941, fue diseñado por el arquitecto municipal Pedro Ispizua. Se encuentra en las calles Ribera Botica Vieja y Rafaela Ibarra y su característica más llamativa es la enorme estatua de un tigre que le corona.

La construcción albergaba la fábrica, las oficinas y el local de exposiciones de la empresa de correas "El Tigre", se supone que de ahí la estatua, sin embargo, también se cuenta que el propietario tuvo sus más y sus menos con la burguesía bilbaína de Indautxu y que por esta razón colocó a la fiera rugiendo.

La estatua del tigre, de nueve metros de longitud y esculpida en hormigón, fue obra del escultor alavés Joaquín Lucarini, que la terminó en 1943. Lucarini cuenta con más obras en la Villa como Verano, situado en el parque a los pies de este edificio, y Niño leyendo, en alameda Conde de Arteche junto al parque de Doña Casilda. Del tigre mucho se ha hablado y discutido porque muchas de las personas que lo veían y no conocían la historia -yo entre ellas- pensaban que era una leona.

El edificio, de cortes limpios y sencillos, mezcla el estilo industrial con ornamentos de casas señoriales, en su parte superior tiene un mirador cilíndrico compuesto por dos terrazas semicirculares porticadas con columnas, y en lo alto de esta estructura -a modo de pedestal- se exhibe "El Tigre".






domingo, 2 de febrero de 2014

Global Innovation Day en Bilbao

Estrujarse el cerebro es la clave para progresar, y en estos tiempos en los que la crisis aprieta para sobrevivir. Por ello el pasado jueves, 30 de enero, se celebró en el emblemático edificio AlhóndigaBilbao la tercera edición del Global Innovation Day. Este encuentro -organizado por Innobasque (Agencia Vasca de la Innovación) y patrocinado por el Ayuntamiento de Bilbao y Deloitte- convoca a todas las organizaciones y personas de Euskadi que trabajan o se interesan por la innovación en cualquier campo y sirve para que den a conocer sus experiencias, productos, servicios y las últimas tendencias en investigación.

Desde las nueve de la mañana hasta las siete de la tarde se sucedieron cuatro paneles de conferencias y 21 talleres, y pudieron visitarse 35 txokos expositivos (stands). Para comenzar la jornada con fuerza la conferencia inaugural estuvo a cargo de Carmen Medina, directora del Centro de Inteligencia Federal de Deloitte en Estados Unidos y que durante 32 años fue directora de Inteligencia de la CIA. Su ponencia trató sobre el papel de la innovación, la colaboración y las redes sociales en el mundo empresarial.

El segundo panel de conferencias lo dirigió Joseba Madariaga, director de estudios de Laboral Kutxa y vicedecano de Deusto Business School, y trató de arrojar luz sobre cómo invertir en innovación sin aumentar los costes de una empresa. En esa mesa redonda participaron responsables de distintas compañías como Siemens Bank, Perpetuall, International Ventur Club y Crecer+, entre otras.

En el tercer panel el director de Innovación de la consultora Altran España, Borja Baturone, presentó el informe Índice de Potencial de Innovación 2013, en el que Euskadi sale muy bien parada y se sitúa en esta área a la par que Suecia, primer país europeo.

El cuarto y último panel puso de relevancia la responsabilidad social corporativa como fuente de innovación, organizado por Innobasque y Foretia reunió a responsables de Euskaltel, Fundación Eroski y Zeltia.

En total participaron 75 organizaciones y durante todo el día AlhóndigaBilbao fue un bullir de ideas puestas en común y generación de sinergías, a las que se pudieron sumar todas las personas que conociendo o no el evento se acercaron por allí y pudieron ver lo que se ofrecía en los stands.

Para mí, la única pega que se le puede sacar a esta jornada es que sólo dura un día :-)









lunes, 27 de enero de 2014

The Sunday Market Bilbao


Ayer se celebró la segunda edición de The Sunday Market Bilbao, el Museo Marítimo acogió de nuevo este evento que al más puro estilo de mercadillo londinense y bajo el lema “Pasión por las cosas bonitas” reúne puestos de decoración, mobiliario, libros, vinilos, ropa vintage, productos artesanales y de diseño, flores, tartas, cupcakes, golosinas… de todo para caer en la tentación de llevarse algo a casa.

A la primera edición, el 15 de diciembre, acudieron más de 3.500 personas y este domingo también ha sido un éxito, la cola se extendía a lo largo del Muelle de la Sota, por suerte el tiempo aguantó y aunque no fue un día soleado, la espera sin lluvia se llevó mejor. El precio de la entrada es de 2 euros, que si luego entras a ver las exposiciones del Museo se te descuentan, además con la entrada participas en el sorteo de dos cajas de artículos valoradas en 350 euros.



Los stands están repartidos por la planta baja del Museo y en la superior hay talleres y actividades para niños. Para hacer un descansito y coger fuerzas el Museo cuenta con una cafetería, La Terraza del Museo, y en la calle había instalados dos puestos, uno de perritos calientes y otro sólo para los que tuviesen antojo de percebes, caracolillos y quisquillas. 

En los stands se pudieron ver preciosas parisinas estampadas en vivos colores, turbantes y pamelas, caramelos de violeta, ramos de golosinas, gafas de madera hechas de skate reciclado, artículos de decoración como sifones o unas chapas metálicas con emoticonos sonrientes, lámparas y cojines con estampados étnicos, y ropa de bebé made in Euskadi con boina y todo. Mención especial merece el puesto para recaudar fondos para los tres hermanos bilbaínos afectados por el Síndrome de Sanfilippo, a los que se les pudo ver divirtiéndose por allí.

No olvidéis vuestra próxima cita con The Sunday Market Bilbao, que se celebrará el último fin de semana de cada mes.


Aquí os dejo unas fotos de algunas de las cosas que estaban a la venta, que disfrutéis:















jueves, 23 de enero de 2014

De concierto en concierto


En Bilbao gusta la música y mucho, cada vez hay más oferta y variedad de conciertos, desde cualquier estilo musical rock, pop, indie, música electrónica, grunge, folk, jazz, música clásica hasta bandas noveles o reconocidas internacionalmente como las que se dan cita en el Bilbao BBK Live Festival. Ya sólo nos queda instaurar esa moda tan británica de dar conciertos gratis en los bares, es el siguiente paso.

Para los próximos días hay tres citas musicales en la ciudad. Mañana, viernes 24 de enero, a partir de las diez de la noche el Kafe Antzoki se llenará con la energía y el ritmo de The Fleshtones. Esta banda neoyorkina, que inició su carrera en 1976, dará a conocer su último álbum Wheel of talent y hará un recorrido por los principales éxitos de sus casi cuarenta años de carrera. La mezcla más divertida de rock and roll y rhythm and blues.

Nos vamos de New York a New Jersey para presentar la siguiente actuación, porque en la Sala Rock Star actuará Band Jovi, una banda tributo a la estadounidense Bon Jovi con la que todo el público saltará desde el primer acorde. El concierto, también el viernes 24 de enero, comenzará a las ocho de la tarde.

Por último, el jueves 30 de enero la Sala BBK nos traerá el increible sonido del cuarteto de jazz del gran batería Ginger Baker. Calificado como uno de los mejores baterías de la historia, Baker fundó junto a Eric Clapton el mítico grupo Cream y fue uno de los primeros en incorporar el uso del doble bombo. Aunque sus inicios están vinculados al rock siempre se le ha considerado un músico de jazz. En esta ocasión le acompañarán Pee Wee Elis al saxo, Alex Dankworth al bajo y la percusión de Abass Dodoo.

miércoles, 8 de enero de 2014

¡Bienvenidos a In Bilbao!

¡Bienvenidos a In Bilbao!

Este blog es una especie de cajón de sastre de Bilbao, en él podréis encontrar todo tipo de información, desde bares y restaurantes abiertos recientemente a los de siempre, conciertos, obras de teatro, exposiciones de museos, tiendas, acontecimientos deportivos y cualquier cosa interesante que ocurra. Espero que os guste, os sirva de utilidad y sobre todo os entretenga. Y para empezar, un símbolo de la ciudad que refleja su pasado industrial y su evolución: la grúa Carola.

La grúa Carola, que hoy pertenece a la colección permanente del Museo Marítimo Ría de Bilbao, se encuentra en el muelle Ramón de la Sota, junto a la antigua Casa de Bombas y el propio museo. La Carola fue construida en 1957 en unos talleres de Erandio y en su época era una de las grúas más potentes del Estado, con 30 toneladas de peso y 60 metros de altura. Cuentan que debe su nombre a una bonita mujer llamada Carola que todos los días cruzaba la Ría desde Deusto para ir a trabajar y cuando los operarios de los Astilleros Euskalduna la veían, paraban para piropearla e incluso se subían a la grúa para poder observarla mejor. Para evitar la interrupción de la producción un día el director de los astilleros le ofreció un coche para llevarla pero ella no aceptó y continuó cruzando la Ría como hasta entonces.
Actualmente la grúa Carola es la única que se conserva en Bilbao que fue utilizada para la construcción naval y su última renovación, por la que brilla más su intenso color rojo, fue el pasado mes de noviembre.