Aunque en Bilbao somos de leones también tenemos por ahí algún tigre suelto. El edificio de "El Tigre" de Deusto es del que hoy vamos a hablar. Este singular edificio, con forma de ele y construido en 1941, fue diseñado por el arquitecto municipal Pedro Ispizua. Se encuentra en las calles Ribera Botica Vieja y Rafaela Ibarra y su característica más llamativa es la enorme estatua de un tigre que le corona.
La construcción albergaba la fábrica, las oficinas y el local de exposiciones de la empresa de correas "El Tigre", se supone que de ahí la estatua, sin embargo, también se cuenta que el propietario tuvo sus más y sus menos con la burguesía bilbaína de Indautxu y que por esta razón colocó a la fiera rugiendo.
La estatua del tigre, de nueve metros de longitud y esculpida en hormigón, fue obra del escultor alavés Joaquín Lucarini, que la terminó en 1943. Lucarini cuenta con más obras en la Villa como Verano, situado en el parque a los pies de este edificio, y Niño leyendo, en alameda Conde de Arteche junto al parque de Doña Casilda. Del tigre mucho se ha hablado y discutido porque muchas de las personas que lo veían y no conocían la historia -yo entre ellas- pensaban que era una leona.
El edificio, de cortes limpios y sencillos, mezcla el estilo industrial con ornamentos de casas señoriales, en su parte superior tiene un mirador cilíndrico compuesto por dos terrazas semicirculares porticadas con columnas, y en lo alto de esta estructura -a modo de pedestal- se exhibe "El Tigre".
No hay comentarios:
Publicar un comentario